Déficit fiscal



Por : AMILKAR ACOSTA MEDINA.
CON  la caída de los precios de los productos básicos se vienen afectando los ingresos del Estado. Recordemos que en 2013 la Nación recibió el 4.3% del PIB por el solo concepto de la tributación de las petroleras, sin contar con los dividendos que percibe de manos de Ecopetrol. Estamos hablando de una suma que se aproxima a los $ 30 billones. Se espera que la renta petrolera para el Gobierno central se reduzca de 3.5% del PIB en 2013  y 2.6% del PIB en 2014 a cerca  1.2% del PIB en 2015 y de 0.8% del PIB para 2016, lo cual le significa un grave predicamento para las finanzas públicas.
Según el ministro Cárdenas, Colombia perdió recursos equivalentes a 1.4% del PIB debido a los menores ingresos provenientes del sector minero-energético. A ello se viene a sumar el encarecimiento del servicio de la deuda a causa de la devaluación, el cual asciende a cerca de 0.3% del PIB. O sea, si sumamos los menores ingresos a percibir con las mayores erogaciones para servir la deuda externa tenemos 1.7% del PIB comprometidos. De este modo es de prever que el déficit fiscal que el año pasado fue de 2.4% y este año se proyectaba en 2.8%, el Ministro de Hacienda ya aceptó subir la meta del déficit fiscal para este año hasta el 3%. No obstante esta meta, prevista en el MFMP se cumpliría siempre y cuando los precios del petróleo se ajusten a las expectativas del mismo , de US$ 74 el barril para este año y US$ 70 para el año entrante, cuando no hay un solo analista especializado que le apueste a precios por encima de los US$ 65 el barril.

El Gobierno está haciendo malabares para poder sortear los déficit gemelos (déficit en la Cuenta corriente de la Balanza de Pagos y déficit fiscal) a los que se enfrenta, con la limitante que le impone la Regla fiscal, que es como una camisa de fuerza que le resta capacidad de maniobra. Con mucha sindéresis el exministro Hommes le aconseja al ministro Cárdenas “que sería mejor no sobrepasar los límites establecidos para su cumplimiento, pero no forzar un resultado fiscal con el solo propósito de cumplir la ´regla fiscal´ sin tener en cuenta crecimiento o empleo, no necesariamente es un buen manejo económico. La acción del Gobierno debe estar orientada a suavizar el impacto de los ciclos económicos, no a intensificarlos”.

Mucho cuidado, entonces, con tomar medidas austericidas, como las que precipitaron la recesión de la economía de la Unión Europea y que tiene en ascuas a la de Grecia. Ojalá no se les dé por imitar a los gramáticos de nuestra historia republicana, dándose a la tarea de sacrificar un mundo para pulir un verso. La tragedia griega es el epílogo  de una política de este corte que sumió a la UE en la recesión.